28 noviembre 2015

¿Caen monumentos franquistas?


El jueves 26 de noviembre nos despertábamos con una imagen que muchos y muchas llevábamos décadas esperando: el obelisco dedicado a Franco y al golpe militar que se gestó en el Monte de Las Raíces, en el municipio de El Rosario en Tenerife, hecho añicos y por los suelos. Yo vi la foto en redes sociales bien temprano y reconozco que una sonrisita estuvo en mis labios toda la mañana pero al llegar a casa esa sonrisa se tornó en un más de lo mismo porque estos se creen que uno es gilipollas.

En periódicos locales y en La SER a nivel nacional se decía que en cumplimiento de la Ley de Memoria Histórica el Cabildo de Tenerife (sic) había demolido el monumento que conmemoraba en Tenerife el alzamiento militar en el lugar donde éste se gestó. Pensé dos cosas, primero en los miles de muertos de los dos bandos que fallecieron por una guerra civil repugnante y en que si estos del Cabildo se creen que somos imbéciles. Con un ordeno y mando, y una pala mecánica, se apropiaban repugnantemente de la lucha y la reivindicación, me atrevo a decir que de millones de canarios, que llevamos décadas pidiendo que tal esperpento desapareciera de ese lugar a menos de un mes de una cita electoral. Se podían haber esperado al dos de enero, el titular hubiera sido Empieza 2016 con un gesto de reparación histórica por parte de El Cabildo, que después de tantas y tantas décadas de espera por un mes más no hubiera pasado nada. Es más, hasta hubieran quedado muy elegantes. Pero no, tenían que manipular a la opinión pública como si ya todo estuviera resuelto en Canarias y no hubiera un 38 por ciento de paro estructural y una economía sumergida, en connivencia con los empresarios y la administración, que hacen que en las islas no haya un estallido social. Y lo mandan a hacer unos sin vergüenzas que tienen un sueldo impresionante y blindado con un montón de prebendas que salen de nuestros impuestos.

Me acordé de una cosa que me contó un buen amigo, ahora ya mayor pero no menos concienciado, que militaba en los años duros del franquismo en células comunistas. Esto se puede contar primero porque no hubo delito y segundo porque si llega a haber éste estaría prescrito. En esa época estuvieron intentando conseguir explosivos (sic) para derribar el monumento pero como los enlaces fallaron lo intentaron con una camioneta y una soga pero no pudieron derribarlo porque los cimientos del obelisco eran muy sólidos. Para mi estos son los Héroes y no estos trepas que, sentados en un sillón que le pagamos, se aprovechan de la situación para sacar rendimiento personal y político. Y que conste: nadie más que yo se alegró de ver los escombros de semejante ignominia por los suelos aunque el franquismo sociológico no se haya eliminado aún después de 40 años de la muerte del dictador.


Aprovecho para mandarle un mensaje a Podemos en el Cabildo de Tenerife y, especialmente a su Consejero Insular Fernando Sabate, ese que su hermano sigue explotando el Teleférico de El Teide a todas luces uno de los mayores atentados ecológicos de la isla. Tengo el dedo anular de mi mano derecha levantado, si quieres súbete en él y pedalea. No nos tomes por imbéciles. ¡Ya está bien! Encima aprovechando ese grito que defendías de manera hipócrita has llegado hasta donde estás para tenerlos cuadrados y ser un elemento decorativo en ese Cabildo. Vergüenza deberías de tener pero creo que eso ya lo perdiste hace años, desde que renegaste de la lucha contra el puerto de Granadilla porque eso ya no te da rentabilidad.