La
situación que ven en el vídeo de arriba se pudo haber producido no
sólo en la fecha de captura, pone que es del 30 de octubre de 2013,
sino hace diez, cincuenta, cien o mil años aunque con otros
componentes. Creo que gracias a la Tecnología y a los Big Data, se
podría demostrar ahora mismo como cierta la teoría de los seis grados de separación, esa que sostiene que entre cualquiera de
los 7 mil millones de habitantes de este planeta se puede establecer
una relación, entre dos personas cualesquiera, de un máximo de seis individuos de distancia.
Pero
no quiero hablar de esto ahora sino del vídeo que les explico un
poco de qué va. En la ciudad de Berlín un muchacho se busca la vida
cantando en la calle una canción que dio la fama al grupo británico
Bronski Beat llamada Smalltown Boy que habla de un
joven que se tiene que marchar de una pequeña ciudad por la presión
que siente por ser homosexual. Estamos hablando de 1984. Luego el
líder de este grupo y compositor de la canción, Jimmy
Somerville, se fue a The Communards y acabó su carrera en
solitario. El tipo que aparece a la mitad del vídeo vestido de azul,
bajito y paseando su perro para improvisar un dueto con el muchacho
es el mismo Jimmy. Fíjense que el chico no se da cuenta de
quién es hasta que acaba la canción. También llama la atención de
que habían dos personas más grabando la anécdota y se nota que
está sin planificar. Repito, esta situación se podía dar en
cualquier momento de la historia pero hubiera pasado desapercibida
como pasa nuestra vida delante de nuestras narices todos los días.
¿Qué es lo que hace que esto sea distinto aquí? Que alguien subió
el vídeo a YouTube, se convirtió en un viral y en menos de dos años
ha sido visto más de 4 millones de veces. El mundo es un barrio y
Berlín una esquina cualquiera. Esto ha sucedido gracias a las
Tecnologías de la Información y la Comunicación que están
completamente introducidas en las sociedades avanzadas y que todavía
los políticos y otros ignorantes llaman nuevas tecnologías a
algo que ya está completamente asentado en sociedades como la nuestra.
¿Qué
nos llama la atención de este vídeo? El buen rollo entre dos
personas que no se conocen, probablemente el muchacho no había
nacido cuando Jimmy
compuso esta canción, y el mensaje positivo que nos comunica. Hace
un año pensaba que el mundo si iba a cambiar lo haría desde arriba
hacia abajo pero ahora pienso que esto es imposible o
si sucede yo no lo veré.
Un
ejemplo de libro de cómo esto no va a ser así lo he visto estos
días de como Sí Se Puede se apropió de la marca Podemos, echó
a los 50 que más trabajaban de la organización y ahora esperan ser
más de lo mismo pues cuando venga Pablo Iglesias a hacer mítines
llenará estadios y horas en los medios y les hará la campaña
gratis. Hace un año me hubiera indignado todo esto, ahora me río de
que los intelectuales
que dirigen el partido sean tan previsibles y mediocres que lo que
hacen es gracia.
Este
mundo nunca se podrá cambiar desde arriba sino desde abajo, con los
buenos gestos de la gente,
con la educación,
con la empatía
y con tecnologías
que hagan llegar a la gente estos
buenos propósitos y no la
basura que muestran los grandes medios. ¿Que Google se ha convertido
en un Gran Hermano
y ya sabe casi todo de nosotros? Sí, esto es cierto pero también
gracias a las TIC's hay gente que se está visibilizando, que hacen
que sus buenos gestos se repartan por todo el planeta y, los más
importante, siempre surgirán grupos de mentes potentes, que en otras
ocasiones no hubiera tenido
oportunidad, que encontrarán
un fallo en el software que nos controla, los programas por
definición siempre serán imperfectos, y lograran que poco a poco, y
con los pequeños gestos que comunicamos al que tenemos al lado, este
mundo sea un lugar más decente, habitable y menos pudridero. Como
dice el estribillo de la canción run
away, turn away
(aléjate, date la
vuelta) de aquellos que
apuestan todo por los grandes cambios que nunca veremos.