Debo reconocer que con toda
esta historia viral del vídeo de Conciencia Urbana en el Metro de
Madrid improvisando el tema del grupo La Mosca Tse Tse Para no
verte más antes de verlo fui bastante escéptico. En los medios
de comunicación de las islas ya se hablaba de ellos pero siempre he
sido bastante desconfiado con estas cosas que aparecen de repente y
con la misma se van para siempre. Es más, pensaba que de aquello de
lo que se hablaba, sin haber visto el vídeo todavía, era una parida
más sin gracia como la mayoría de las que circulan en las redes
sociales. Mi desconfianza más absoluta se transformó en asombro y
luego en la mayor de las complicidades cuando, viendo por fin el
famoso vídeo, Adán Ojeda en el minuto 1:03 le decía al muchacho
que lo sigue con un teléfono móvil 'si me graba me lo cuelga en
YouTube' así en canario. Casi dos millones de visitas más
tarde lo siguiente fue buscar en el servidor de vídeos de Google para
ver si habían más vídeos de este tipo y cual no fue mi sorpresa
que encontré otros de Adán Ojeda desde 2009 haciendo estas mismas
improvisaciones, no con el guitarrista Pedro Aldimayo, en el mismo
Metro de la capital. Me acordé entonces que en
Canarias, sobre todo en la isla de Gran Canaria, la tradición
improvisadora en la canción ha sido siempre un arte y que se conecta
con la emigración a Cuba. Me puse a pensar que estos
muchachos también estaban en Madrid emigrados de las islas.
Conciencia Urbana es un
derroche de talento en un país donde la mediocridad llena horas y
horas de radio y televisión y ocupa millones de páginas en prensa e
internet con programas de supuestos talentos como Operación
Triunfo y La Voz que hacen caja rápida pero que nunca
transformarán nuestra cultura. Sacamos en claro en todo esto una
cosa, que los programadores que hacen este tipo de programas, al
igual que los políticos, jamás viajan en el transporte público.
Espero que este derroche de talento que exhiben Adán y Pedro, y que
gracias a lo viral del vídeo han recorrido redacciones en radios y
televisiones de todo el estado, llegue muy lejos y se transforme en
muchas cosas positivas durante mucho tiempo para el deleite humano en
una época que la cultura y la educación han sido despreciadas por el
gobierno corrupto del PP a la mayor de las degradaciones posibles y
encima con el regodeo que sólo la más absoluta de las ignorancias
puede llevar a cabo.
En Canarias quedamos en el
archipiélago dos tipos de personas: las que no somos capaces de
marcharnos de aquí por arraigo o por falta de valentía que sufrimos
el nepotismo caciquil que depreda en las islas y una casta, compuesta
por políticos corruptos, empresarios malvados y altos funcionarios
segundones enchufados en las instituciones canarias, que es la
responsable de la explotación de los que vivimos aquí y de la
irreversible degradación de nuestro territorio y de las miserias que
hay en nuestra sociedad. La mediocridad de esta casta es la desgracia
de nuestras islas y uno entiende perfectamente que personas como Adán
Ojeda, Pedro Aldimayo o gente con inquietudes y talento se hayan
tenido que marchar de las islas para triunfar y llevar a cabo su
arte. Sin duda, y como no puede ser de otra manera, los que aquí
quedamos sentimos un orgullo muy profundo de que Conciencia Urbana
esté llevando la voz de nuestro archipiélago por todo el mundo con
gran calidad y dignidad.