La
reciente sentencia del Tribunal Supremo que anula
los acuerdos del 12 de mayo de 2008 de la Comisión de Ordenación
del Territorio y Medio Ambiente de Canarias, COTMAC, que aprobaba
el Plan Territorial Parcial de la Plataforma Logística del Sur de
Tenerife llevada a este Tribunal por la Asociación de Amigos de la
Naturaleza, ATAN, después de que este recurso fuera rechazado en
primera instancia por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias
creo que debería llevar a la reflexión, además deberían de leerse
de cabo a rabo dicha sentencia, a determinadas personalidades
políticas, instituciones, empresas, medios de comunicación,
partidos políticos y hasta sindicatos. Esto no es más que mi
humilde opinión en la que, para empezar, me culpo a mi mismo de
haber perdido bastantes veces el aliento y mi militancia hacia estos
temas como es la construcción del puerto de Granadilla.
En
primer lugar a la justicia de las Islas Canarias, y en particular a
la de la isla de Tenerife, por ser parte del problema y estar
completamente confundida, cuando no es la misma cosa, que la casta
política que nos gobierna y que son los mismos que ponen a esta
gente ahí. Si la justicia no funciona de manera adecuada, el
Tribunal Superior de Justicia de Canarias llegó a decir que el
puerto de Granadilla era una ampliación del de Santa Cruz (sic),
la democracia seguirá enferma por mucho tiempo. Es de esperar que
lean la sentencia y no la usen, como suelen hacer, de papel de baño.
Alguien
debería de cambiar el epitafio de Adán Martín que en paz descanse,
principal promotor de este disparate que ahora el Supremo pone en su
sitio, por la sentencia de este Tribunal. En Canarias somos así: a
las personas que nos han llevado a la debacle les ponemos nombres a
Auditorios, como es el de Tenerife, materialización del despilfarro
de tantos años organizado por este señor.
A
Paulino Rivero, que dijo aquello que removería cielo y tierra para
construir el puerto de Granadilla, y a Ricardo Melchior, por fin
expresidente del Cabildo de Tenerife, al alcalde de Granadilla Jaime
Gonzáles Cejas y a los últimos Presidentes de la Autoridad
Portuaria Luis Suárez Trenor y Pedro Rodríguez Zaragoza, se les
debería caer la cara de vergüenza por todos los disparates que han
dicho y hecho durante tantos años para la consecución de este
terrible puerto y deberían pagar política y patrimonialmente, quizá
hasta penalmente, por tantos años de disparates.
A
instituciones como el Gobierno de Canarias, el Cabildo de Tenerife, a
la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife o el ayuntamiento de
Granadilla en manos del PSOE de manera discontinua deberían de
reparar inmediatamente la década que han estado de espaldas a los
intereses de la ciudadanía y sí a favor de los empresarios
promotores del pelotazo del puerto de Granadilla. Y, como no, también
ahí deberían de haber responsabilidades de carácter político,
patrimonial y penal que hicieran falta.
La
vergonzosa prensa de Tenerife, radios, prensa escrita y electrónica
y hasta la televisión pública que pagamos todos los canarios,
debería de publicar todos los días hasta que se acabe el mundo la
sentencia y entonar el mea culpa por ser la correa de
transmisión que legitima un sistema corrupto como es el de Canarias,
en general, y el de Tenerife en concreto. Mientras decenas de miles
de personas salían a la calle para protestar contra el puerto
durante casi un lustro estos medios miraban a otra parte, contaban
las mentiras de Martín y Rivero y no cumplían su principal labor
con la ciudadanía: informar con rigor, sin faltar a la verdad y de
manera democrática.
El
PSC PSOE y su filial sindical vertical UGT, salvo la honrosa
excepción del expresidente de la Autoridad Portuaria que en su época
se cargó el frente de playa de Santa Cruz de La Palma Pedro Anatael
Meneses, que ahora está en el poder en Canarias deberían poner la
sentencia en sus programas electorales, ya que a veces no han tenido
problema de copiar de otros partidos,
o mejor disolverse para siempre por ser un completo y continuado
fraude electoral.
Coalición
Canaria ha sido lo peor que ha pasado en Canarias en los últimos 20
años, desde que le arrebataron el poder en 1993 a Jerónimo
Saavedra, y esta sentencia es el corolario de los chanchullos, las
corrupciones y todo el caciquismo que han desarrollado en el
archipiélago en todos estos años y por la que se merecen un proceso
general contra este partido y contra los miles de corruptos que éste
ha generado.
El
Partido Popular ha sido la tercera pieza del trile que gobierna en
Canarias. En concreto la sentencia debería de servirle a un
personaje, afortunadamente alejado por ahora de la política, como
Ángel Llanos que durante mucho tiempo actuó como si alguien muy
allegado a la construcción de un puerto, que sabemos que no está
en Plasencia porque allí no hay mar, haciendo un proselitismo
completamente ciego a la infraestructura de Granadilla a pesar que
todo lo que decía eran puros disparates.
La
peor burguesía que sin duda hay en el mundo está en Canarias y,
concretamente, en la isla de Tenerife. De origen humilde, belillos
con dinero que se les suele decir, han acabado por arrebatar el poder
a la decrépita aristocracia del archipiélago y convertirse en los
actuales caciques que dirigen a base de dinero negro a la casta
política que gobierna Canarias. Éstos deberían de tragarse la
sentencia dictada por el Tribunal Supremo esperando que los que estén
involucrados en el pelotazo paguen algún día con su patrimonio y
penalmente el disparate en el que han incurrido.
En
Alternativa Sí Se Puede por Tenerife en Granadilla, que ya no es
Alternativa no porque lo diga
yo ni porque los hechos lo hayan demostrado sino porque en su último
congreso quitaron esta denominación de su nombre, y especialmente
Antonio Cabrera y su antiguo lugar teniente José Luis Fernández
Fuarros se deberían de comer la sentencia con papas y mojo para que
aprendan cómo se puede luchar contra una infraestructura como esta.
Sobre todo porque a estos farsantes lo único que les interesaba era
situarse en una poltrona política mientras a unos cuantos tontos, yo
el primero, nos llegaron a convencer que aquel pacto anti natural con
CC y el PP en el ayuntamiento iba a servir para algo y para detener
la construcción del puerto de Granadilla que comenzó, precisamente,
cuando Cabrera era concejal en dicha institución.
Los
partidos políticos supuestamente alternativos de la isla de
Tenerife, Sí Se Puede, IUC en Tenerife, Los Verdes, Socialistas por
Tenerife y demás franquicias de este tipo como la emisora del CCPC
Radio San Borondón, deberían de serviles de bronca esta sentencia,
lograda por ciudadanos, y de recuerdo de todas y cada una de las
veces que han utilizado las
organizaciones sociales para lograr sus fines políticos partidistas
demostrando, de manera clara, que son más de los mismo y que aspiran
a ser lo mismo.
El mal llamado Observatorio Ambiental de Granadilla, dirigido por un bocazas resentido como Antonio Machado que ha utilizado el dinero público y la supuesta influencia de este organismo para la venganza personal orquestada por este señor a sus antiguos compañeros de la Facultad de Biología de la ULL, debería disolverse para siempre porque esta sentencia pone en jaque no sólo su futuro sino, sobre todo, su pasado legitimador de una infraestructura tan inútil como su director.
El mal llamado Observatorio Ambiental de Granadilla, dirigido por un bocazas resentido como Antonio Machado que ha utilizado el dinero público y la supuesta influencia de este organismo para la venganza personal orquestada por este señor a sus antiguos compañeros de la Facultad de Biología de la ULL, debería disolverse para siempre porque esta sentencia pone en jaque no sólo su futuro sino, sobre todo, su pasado legitimador de una infraestructura tan inútil como su director.
Asamblea
por Tenerife llegó a ser una de las cosas más grandes que ha
ocurrido en Canarias en mucho tiempo. Logró hacer sentir verdadero
miedo a la burguesía chicharera y a la casta política enmarcada en
los trileros de CC, PSOE y PP demostrado en el silencio mediático
que se logró imponer, por orden del difunto Adán Martín, a pesar
que bajo este movimiento social salieron a la calle casi cien mil
personas y hubo un movimiento social continuado sin precedentes en el
archipiélago. La organización se acabó rompiendo por culpa de los
partidos políticos que trataron de medrar en ella, Radio San
Borondón que entro a manipular a saco y un sectarismo históricamente
inherente a la izquierda. Por mi parte sólo me quedan buenos
recuerdos de esta organización pues si bien no fue la primera vez
que algo lograba movilizarme sí que comprendí allí que los
ciudadanos tenemos más poder que el que creemos.
Esta
sentencia pertenece en gran medida a la ciudadanía que ha aguantado
durante tantos años, y lo que queda, pero sobre todo a una serie de
organizaciones como ATAN que ha gastado su tiempo y dinero particular
en llevar hasta el Supremo esta sentencia rechazada por el Superior
de Justicia de Canarias. También al Foro Contra la Incineración de Residuos, y
en especial a Juan Jesús Afonso y a José Mesa, por perder su tiempo
y dinero particular para catalogar
todas las canteras ilegales del sur de Tenerife para rellenar el
puerto. A asociaciones como Ben Magec por al campaña de puesta en
visibilidad que han hecho con poco dinero y mucha pasión. A
la actual Plataforma contra el Puerto de Granadilla que logró seguir
después de la debacle de Cabrera y Fuarros. A
gente que ahora está muerta y que prefiero no nombrar porque siempre
me ha repugnado la utilización de los muertos en campañas de este
tipo. Al abogado Pedro Arcila que a pesar de haber acabado como
político profesional ha militado muchos años en ATAN y ha parado el
puerto de Granadilla incontables veces ya y en general a mucha gente
que, en todo este tiempo, ha ido y venido pero siempre tuvieron fe
que se llegara hasta algo así. Ahora sólo hace falta que la
sentencia de ponga en marcha pero, por lo que parece ya que esto no
terminará nunca, ya hay impresentables como Rodríguez Zaragoza y
Gonzáles Cejas que se están haciendo los locos y
buscando burlas y vericuetos legales para seguir saliéndose con la
suya.