No hace muchos meses el Ayuntamiento de Santa Cruz de Tenerife se declaró en estado de emergencia social debido a que la crisis económica ha producido una seria mella en buena parte de la ciudadanía de este municipio y la gente en serio riesgo de exclusión social aumentó de una manera vertiginosa. No voy a ser yo ahora quien cuestione la conveniencia o no de esta declaración pero lo cierto es que este ayuntamiento ha estado, realmente, en estado de emergencia social la mayor parte de su historia democrática reciente y no sólo porque estos últimos 15 años la alcaldía haya estado en manos de un impresentable de la talla de Miguel Zerolo sino porque dentro del estilo de hacer política de ATI este personaje ha sido de lo más peculiar. No es por descargar de culpas a este hombre pero lo suyo no es único aunque su casposa forma de entender la política y de utilizarlo para sus fines personales, deja la alcaldía de Santa Cruz pero sigue en las listas del Parlamento de Canarias para salir elegido y ser juzgado por sus casos por un tribunal especial cuyos miembros son elegidos por su mismo partido, lo han hecho el paradigma del juego sucio en democracia y del todo vale en política. Me dispongo a analizarlo a él en este texto así como a otras dos personas que, estos días, han destacado también por su juego repúgnate: Mercedes Roldós y Trinidad Jiménez. Podría alagar este texto al infinito porque en un simple suspiro se me ocurren cientos de personajes que viven de la política que son tan indignos o más que estos tres pero esta no es mi misión.
Zerolo deja la alcaldía de Santa Cruz, tras designar a dedo a su amigo Bermúdez con presuntos negocios oscuros en el sur de Tenerife, dejando un agujero en las cuentas del consistorio de más de 150 mil euros despilfarrados en comilonas que no se han podido pagar por insolvencia del ayuntamiento. Concretamente se habla de 66 facturas, la más sangrante una del Restaurante Los Limoneros para siete personas de 404,83 euros del 15 de agosto de 2008 entre los arquitectos del Barranco de Santos, el propio Zerolo y los sociatas Gloria Rivero y Ramiro Cuende. Después del repugnante e injustificable caso conocido como bragasgate en el que todos los grupos de gobierno, todos, metieron mano a la caja para justificar disparatadas facturas hace un par de legislaturas esta última es especialmente sangrante no sólo por la cuantía sino por la fecha, un 15 de agosto, porque ya sabemos que en los consistorios en verano nadie, absolutamente nadie, que tenga cargo público da un palo al agua. Mientras Zerolo va a programas como 59 segundos a dar explicaciones con un habla completamente atropellada y agresiva, forma de expresarse de aquellas personas que no dicen la verdad o que simplemente que mienten, el PSOE en Tenerife se ha montado un verdadero circo del que va a salir totalmente hundido y que, consciente o inconscientemente, le va a dar los votos a CC porque con impresentables como Gustavo Matos, Javier Abreu o Ramiro Cuende hay poco qué hacer. El PSOE es un partido donde habita la falta de vergüenza en cualquier de sus formas pero con este equipo no hace falta ni pensárselo a la espera que Sí Se Puede recoja los votos de los descontentos en Santa Cruz o La Laguna pero, mucho me temo, esto no va a ser así. Y mientras Miguel Zerolo no sólo no se descojona de ellos y de los ciudadanos en todo esto sino que se escapa por la puerta trasera después de tres lustros de manejos oscuros pero permanece en el Parlamento de Canarias no sólo para ir a dormir a sus sesiones sino para ser juzgado por el Tribunal Superior de Justicia de Canarias de manera especial. Muy amigo de sus amigos se presenta Zerolo cuando la comisión, creada por él mismo, para recortar gastos en el ayuntamiento le aconseja que rebaje los cargos de confianza de 86 a 13 cosa que, en una pura vuelta de cinismo, desoye y mantiene a sus amigos hasta el final de la legislatura.
Que Mercedes Roldós diga que un cargo electo debe estar trabajando hasta su último día, cuando lo que todos conocemos es que la mayoría de estos cargos lo hace mínimamente cuando no nunca, durante todo su tiempo de gobierno y firmar con ello contratas para la hemodiálisis en dos hospitales de Canarias a una empresa sin experiencia en el sector por 127 millones de euros a escasas horas de dejar el cargo puede entrar en la normalidad para la lógica de esta gente pero para las personas corrientes esto tiene un tufo grande a pelotazo. Luego alguien va y te dice que lo que hace esta señora es normal pues es típico de todo alto cargo no sólo dejar a sus amigos contentos sino dejarlo todo atado y bien atado. Claro que la diferencia entre esta y otras ocasiones es que hace apenas dos años nos creíamos ricos e intocables, no sólo España que cada vez está más cerca de ser intervenida por la Unión Europea sino Canarias cuyo sistema económico basado en el cemento pero cogido con alfileres atrajo a miles de emigrantes, y ahora estamos muy cerca del suelo donde nunca debimos de haber despegado de aquella manera. Tras un recorte de cientos de millones de euros en los presupuestos de Canarias en educación y sanidad, CC apoya los presupuestos de Zapatero pero el PSOE en Canarias no apoya los de Soria que nos dejó de legado y a los ciudadanos no nos queda otra que poner cara de gilipollas, este tipo de cosas se notan más que antes y esto debería de haberlo tenido en cuenta la Roldós al firmar las contratas la empresa Lifeblood, que no es extranjera sino canaria especializada en la construcción pero que hace la gala a la estupidez de los expertos en marketing de poner nombres anglosajones a sus productos y empresas aún siendo castizos. Mientras personajes como este gestionan las cosas como para sus amigos en Canarias los chicos se amontonan en aulas duplicando capacidad, pasan las semanas sin profesores sustitutos, estando la hora sin clase con cuidadores, en los hospitales se escatima materiales básicos como jeringuillas y los enfermos ingresados den los hospitales se los deja sin merienda, sin agua potable y con un aligeramiento del menú porque hay que dejar a otros dinero para que vayan a Los Limoneros a meterse comilonas a cargo del los presupuestos públicos.
Dejo para el final al personaje que representa una emergencia social, que hay que quitar de la circulación de lo público como a estos otros dos para que no perjudiquen más a nadie, como Trinidad Jiménez. Hace unos días coincidí con una amiga y su hijo de dos años en el tranvía y una mujer, mientras hacíamos reír al niño, no le quitaba ojo al pequeño no sólo porque ella también era madre sino porque el hijo de mi amiga es un encanto. Nos contó casi sin preguntarle que es saharaui, que lleva semanas llorando por el conflicto y que en todo este tiempo no ha podido contactar con su familia en El Aaiún porque no le funcionan los teléfonos. Mientras se le rayaban los ojos, y los nuestros también, nos contó las atrocidades que los marroquíes tienen fama de hacer contra la población civil en los territorios ocupados hasta que se tuvo que despedir porque llegó a su parada. Al bajar del tren recordé a la flamante Ministra de Exteriores Trinidad Jiménez diciendo absolutas estupideces sin sentido de este conflicto mientras recordaba una foto con una pegatina de Sáhara Libre o un vídeo de un mitin de 2003 contra el gobierno de PP exigiendo a éste que se implicara en la causa por la autodeterminación del Pueblo Saharaui que circulan estos días por Internet. Me cuesta disimular pero por gentuza como esta sin vergüenza de Jiménez no puedo sino sentir asco porque sus posturas no sean un mínimo de coherentes sino que se plieguen a los hechos y a la Realpolitik de una manera no sólo enferma sino bastante sucia y burda por trepar en un puesto de la administración que, a todas luces, les viene ancho. La vida me ha enseñado a no creer en estos falso progres pero no puedo evitar sentir asco cuando veo contradicciones tan enormes como las de la Ministra en sólo siete años. A esta gente, a estas malas personas que viven de nuestros impuestos, no puedo otra cosa sino desearles que desaparezcan del cargo público que ocupan pues nos harían un favor inmenso a la ciudadanía.
Termino con una cita de unas declaraciones del mafioso Al Capone de 1931, hechas días antes que lo detuvieran por delito fiscal, recogidas en el libro de Eduardo Galeano Patas Arriba: La escuela del mundo del revés y que a pesar que tienen ya ochenta años, cuando hablamos de estos peligrosos gestores públicos, están más vigentes que nunca: “Hoy en día, ya la gente no respeta nada. Antes, poníamos en un pedestal la virtud, el honor, la verdad, y la ley... La corrupción campea en la vida americana de nuestros días. Donde no se obedece otra ley, la corrupción es la única ley. La corrupción está minando este país. La virtud, el honor y la ley se han esfumado de nuestras vidas.”
Canarias 24 Horas, 22 de noviembre de 2010.