16 febrero 2009

Parar el puerto de Granadilla


Una diferencia básica que deberían aprender los políticos de oficio en un supuesto aunque necesario curso para ejercer como cargos públicos es la que existe entre corruptos y corrupción. Un lector me escribía el otro día desde Alemania para señalarme que también allí los políticos se lucraban del poder para intereses personales, aumentar su patrimonio o acabar en la prostitución de lujo. Por supuesto que en todas partes hay corruptos, le repliqué. Sin este tipo de personas no se entendería el estado cochambroso en el que han quedado las financias mundiales y la economía de orden productivo porque determinados individuos guiados por la avaricia y sin ningún tipo de control político, financiero y judicial han acabado rompiendo el saco del que durante tantos años han robado y se han amamantado. Antes se puede eliminar la caspa como mal crónico del cuero cabelludo de las personas que evitar que en todo sistema los corruptos puedan medrar porque estos son más tenaces e indestructibles que las cucarachas. Sin embargo, por este mismo motivo deben habilitarse políticas adecuadas por parte de las instituciones al tiempo que se garantice que la justicia será inflexible con este tipo de personas para que de la manera más rápida posible sean puestas en su sitio, un lugar con rejas llamado cárcel. La corrupción se da cuando todo el sistema está podrido y no se entiende la riqueza que genera una región determinada sin la intervención de un crimen más o menos organizado o de una clase social que vive y se desarrolla al amparo de estas redes corruptas. Por ejemplo el PIB de Italia sería imposible de explicar sin la existencia de un crimen organizado como la mafia y películas como The Godfather o series como The Sopranos se han encargado muy bien de relatarnos cómo ha podido suceder esto.
Una cosa ha quedado clara después del comienzo este viernes 13 de febrero de las ilegales obras del puerto de Granadilla por parte de la autoridad portuaria: en Canarias no hay simplemente corruptos sueltos sin que el sistema por entero está basado en la corrupción y no se entiende lo que está sucediendo en el archipiélago sino es porque la vida política está completamente deteriorada. Después de que los hechos hayan desmontado una a una todas las supuestas razones esgrimidas por los defensores de este proyecto, razones que jamás se han atrevido a debatir pública y democráticamente porque no tenían argumentos sólidos para defenderlas y sólo les han cabido las formas autoritarias, sólo han podido empezar estas obras ilegales vía decretazo de Berriel, previamente falseado y borrado en uno de sus párrafos de su informe de impacto, en el Boletín Oficial de Canarias con la rebaja de la seba, Cymodocea nodosa, en el catálogo de especies protegidas de la Comunidad Autónoma y que supondrán la desaparición de esta especie en las costas de Granadilla como este disparate de proyecto se llegue a realizar. Ya sabemos que el puerto de Santa Cruz en 2008, fecha límite que en 2002 ponía los partidarios del proyecto, no estuvo saturado sino que está infrautilizado y hundido en la miseria que sus dos últimos gestores, el imputado por cohecho y ahora parece que lucrado con las instalaciones del parque marítimo César Manrique Luis Suárez Trenor y el actual Pedro Rodríguez Zaragoza, lo han acabado dejando. La actual crisis mundial ha mostrado cuan frágil es el negocio de las mercancías y esta recesión a escala mundial que vamos a vivir en los próximos años dejará muy tocado el negocio de los puertos que van a sufrir una bajada en los costes de tal calibre a la que Canarias le será imposible igualar. En este sentido ya se están produciendo regulaciones de empleo en el vecino Puerto de La Luz y de Las Palmas para intentar salir de la crisis que se aproxima de la mejor manera posible. Lo de la imperiosa necesidad que se inventaron para que la Comisión Europea aprobara esta infraestructura se ha caído por su propio peso y lo único que ha quedado es un Consejero de Medio Ambiente como Berriel que hace trampas con los informes medioambientales, Paulino Rivero puso al lobo a cuidar las ovejas pues su cargo parece más de fomento que de cuidador del medio natural, y que se hace urgente que dimita por dignidad o que alguien lo cese de una puñetera vez. El último mito que ha caído estos días ha sido el de la creación de empleo en la construcción del puerto con un contundente informe elaborado por el partido Alternativa Sí Se Puede, con datos de la propia Autoridad Portuaria, de que las obras de este macro proyecto darán a lo sumo, y en el momento más álgido, sólo 45 puesto de trabajo. Lo que se persigue con la construcción de este puerto es que las empresas adjudicatarias de las obras de la escollera y que es lo único que hay presupuestado, una UTE donde está el empresario afín a CC e imputado por cohecho Antonio Plasencia, cobren los más de 100 millones de euros y ya está. En este sentido, y si el puerto terminara por construirse, acabaría abandonado e inservible como ocurre con el de Arinaga en el que sólo ha atracado un barco y un cayuco en toda su existencia. Hay que recordar que la Unión Europea está pidiendo el dinero de fondos comunitarios que puso para esta nula infraestructura porque no se hace uso de él como se deberá de hacer en su día con los que pueda poner para Granadilla, una cosa que, como ya he dicho, acabarán igual de inútil.
La Sociedad Civil en Canarias ha demostrado que está siempre muy por delante de sus gobernantes no sólo por capacidad de trabajo sino porque tienen muy claro lo que es el interés general. Mientras los políticos creen que gobiernan, lo que hacen más bien es llenar sus egos personales al tiempo que representan los intereses de los que los mantienen en el poder, las organizaciones ciudadanas son capaces de presentar soluciones más plausibles. El mismo día que comenzaban las obras de este desastre, el viernes 13, hubo en la Universidad de La Laguna un acto organizado por la comunidad científica mostrando el rechazo de la arbitraria y tramposa decisión de Domingo Berriel de rebajar la catalogación de la Cymodocea nodosa para poner en su sitio todas las mentiras que los del no a un desarrollo económico y medio ambiental optimo, los verdaderos terroristas sociales del archipiélago, han planificado para estos años en las islas. En este sentido hay que señalar que es un lujo para Canarias contar con una organización social y ambiental como Ben Magec Ecologistas en Acción que en estos años ha organizado multitud de actos contra este puerto y dos ILP que juntas llegan casi las cien mil firmas para proteger las costas de Granadilla de las fauces de estos constructores y otra para frenar la degradación del territorio con una verdadera moratoria turística y no la ley del cemento y de medidas urgentes esgrimida por Berriel. Tanto es el buen hacer de esta organización que hasta el PSOE se acerca a ellos para que por lo menos si no se puede pegar su buen hacer se les pegue su popularidad.
En numerosas ocasiones he dicho que el PSOE no sólo es partícipe sin responsable de esta trama de constructores que tratan de sacar este puerto inútil para adelante. Atrás queda un Jaime González Cejas, que hasta las mismas estuvo presuntamente podrido de corrupción en el ayuntamiento de Granadilla la anterior legislatura cuando fue alcalde, investigado por la Fiscalía Anticorrupción en el que al relajación de ésta a la hora de investigar sus negocios deja mucho que desear y que ha sido la crítica por muchas organizaciones. Aún así Pedro Anatael Meneses es un hombre del PSOE muy respetado entre las organizaciones sociales porque en este pulso de Granadilla ha perdido probablemente muchas de sus ambiciones políticas, lo han atacado desde CC pero también dentro de su partido, y porque siendo una persona más que cualificada para hablar de puertos en Canarias no ha escondido tras las medias verdades cuando y la conseguido ser uno de los mayores en desentrañar las mentiras que rodean a este sucio puerto. Por poco más de 48 horas consiguió que su partido se posicionara en contra del puerto de Granadilla aunque poco duró la unidad. Santiago Buenrrollito Pérez que siempre se deja ver por todas las manifestaciones contra el puerto para impregnarse de salud democrática y que ya sabemos que se dedica a la política porque es un renegado de las aulas, algunos profesores universitarios afortunadamente piensan que es un lujo dar clases en esta institución, no dudó desde su puesto en el Cabildo de Tenerife, junto a un trepilla como Balbuena, señalar que el PSOE no está en contra de un puerto allí pero sí que no le parecen bien los teje manejes que se han hecho para empezar las obras. Mientras el PSOE actúe de esta manera no sólo serán más de lo mismo, la tercera pata del trile que soporta este sistema podrido junto con CC y PP, sino que van a tener en contra, en buena medida, a la ciudadanía concienciada porque son cómplices, cuando no responsables, de todo lo que está sucediendo.
En ATI CC no sólo no tienen ni puta idea de lo que es la democracia sino que además la detestan. Las últimas declaraciones de Paulino Rivero en las que señalaba que eran inconcebible que grupos minoritarios trataran de retrasar las obras han servido para mostrar al mismo tiempo que no tiene ni idea de lo que es un estado de derecho y de que las maneras de la ciudadanía de ejercer la democracia no es la del voto ceremonial sino de hacerlo de manera directa. Además de no debe saber de manera clara quién o quiénes nos oponemos a esta maldito puerto porque, entre otras cosas, la obsesión de estos gobernantes ha sido al de oscurecernos de manera mediática y ciudadana. Allá están los años de las grandes manifestaciones y de la política férrea de opacidad de Adán Martín llegando a manipular hasta los datos de Gesplan para que una manifestación de más de cien mil personas se quedara en poco más de dos mil. Lo que no se puede concebir es que la incompetencia del actual presidente haya llegado a los límites a los que ha llegado dejando completamente hundida a esta comunidad y que no haya marchado del poder siquiera por dignidad. La batalla contra este puerto no va a parar porque las personas y organizaciones que llevan como una década luchando contra este despropósito no van a dejar la batalla tan fácilmente y por eso hay y habrá acciones en los tribunales de justicia, completamente legítimas y democráticas aunque a alguien de nula talla como a Rivero le puedan molestar, y para que haya justicia en este caso y no se convierta en tema en otro caso más de tierra quemada, como los que abundan en este archipiélago plagado de corrupción, los tribunales deberán funcionar correctamente. La verdad es tenaz, al final todo acaba saliendo, y para ello haría falta una ley que regulara y penalizara, con cárcel y con penas económicas, las malas decisiones políticas que tan en baja calidad democrática dejan a las instituciones encargadas de la gobernanza. Y es que un político que no sólo sabe que está tomando una mala decisión y que además se aprovecha para que él u otros medren porque sabe que todo va a acabar diluyéndose en la maraña oscura de la administración no debe salirle gratis mientras la ciudadanía es la que paga como siempre sus errores. Si no saben administrar que se dediquen a trabajar en empresas privadas que con tan buenos ojos ven cuando gobiernan a ver si allí duran un asalto cuando por su culpa éstas pierdan dinero.
El 14 de marzo la comunidad y científica y varias organizaciones han convocado a la ciudadanía una manifestación para mostrar el rechazo contra esta disparatada infraestructura. Aunque ya no es tiempo de manifestaciones allí habrá que estar una vez más.
Canarias 24 Horas, 16 de febrero de 2009.

Nota: el gato de la fotografía del "No al puerto en Granadilla" como si hubiera sido por un presentimiento murió de manera súbita el día antes que empezaran las obras, el jueves 12. Después de un año y medio con él y con una edad de cinco años que se le calculaban su dueña lo encontró muerto en casa, como si estuviera dormido, al llegar del trabajo sin que las semanas o días anteriores hubiera mostrado patología alguna. Permítase esta fotografia como homenaje al que siempre fue un gato cariñoso, cercano, tranquilo y mejor que la mayoría de los humanos que he conocido. Se llamaba "Rubi" pero algunos le decíamos "Luis".