Fue en julio de 2005 cuando una compañera y yo estábamos pegando carteles en La Laguna convocando una protesta contra la visita de Jacques Barrot, Comisario de Transportes de la Unión Europea, que había sido invitado a Canarias por el gobierno autonómico para mostrarle los enclaves donde se quieren ubicar los puertos de Arinaga y Granadilla cuando, en la calle Heraclio Sánchez frente al bar Benjamín, un fumeta de los que se sientan por allí al solecito nos preguntó que qué andábamos haciendo. Le contamos para que eran los carteles que estábamos pegando y nos dijo que el puerto en Granadilla estaba ya más que hecho. Añadió que el de joven había sido rebelde pero que el sistema era muy cruel y que mejor era estar sin ideales que luego se sufre menos cuando vienen los palos porque no se puede luchar contra el sistema que está lleno de corruptos muy poderosos. A mi amiga y a mi nos pareció un resumen perfecto de lo que es la sociedad canaria de principios del siglo XXI: un ente desinformado, conformista, narcotizado (todos lo estamos alguna vez en esta sociedad de una manera o de otra pero esto no explica la inacción) y encima colaboradora con el sistema por la falta de capacidad crítica. Durante la protesta frente a la presidencia del gobierno de Canarias, ese edificio de hormigón citado como ejemplo de la nueva arquitectura canaria pero que no deja de ser la cueva de Alí Babá y sus muchos más de 40 ladrones, nos enteramos que el Barrot había sido investigado en Francia por financiación ilegal de su partido político pero que su estatus de comisario europeo lo hacían intocable. Vimos claro que aquello no era más que una cumbre de mafiosos en este archipiélago bananero y paraíso de Adán.
Han pasado más de nueve meses desde aquella visita y el puerto en Granadilla está menos cerca de hacerse que entonces. Eso sí, nuestro amigo el fumeta sigue tan narcotizado como entonces e, igual que la sociedad que se informa por los medios de ocultación de las verdades como el grupo mediático oficial de coalición de El Día, no se han enterado de los nuevos acontecimientos que han dado un giro de 180 grados al asunto. El pasado 22 de marzo de 2006 va a pasar a la historia de España porque puede que sea el inicio del fin del terrorismo de ETA porque fue el día en el que se anunció la tregua indefinida del grupo vasco. El día anterior, martes 21, puede que sea histórico para Canarias porque si los ciudadanos logramos parar el puerto en Granadilla en Canarias las cosas no van a ser ya iguales. En ese día se reunión la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo, a instancias de los grupos opositores al proyecto del puerto en Granadilla, para establecer un debate sobre la idoneidad de la construcción de ese puerto y de las alternativas existentes. Este debate fue reiteradamente secuestrado al parlamento de canarias, que tiene algunas zonas de sus dependencias expropiadas ilegalmente a sus legítimos propietarios y con el asunto en los tribunales que hacen que sea el único parlamento okupa del mundo, y con ello se demuestra cada día más que Canarias es un archipiélago que está colonizado por España pero que siempre ha dependido económicamente de potencias extranjeras. La delegación de la administración, compuesta por 30 personas que viajaron en primera clase, se quedaron en hoteles de cinco estrellas y comieron en restaurantes de cinco tenedores, todo ello a cuenta del contribuyente, ha sido llamada desde algún medio crítico como la de Caciques sin Fronteras. Es patético que con nuestro dinero, y sin argumentos válidos para la construcción del puerto en Granadilla, hayan ido allí a hacer el ridículo y a defender los intereses de los especuladores y mafiosos del cemento que quieren dar el mayor pelotazo urbanístico de Canarias construyendo un puerto inútil al mismo tiempo que se mostraban contrarios, por esta acción, a los auténticos y legítimos intereses de la sociedad canaria que son la preservación del medio ambiente y el rechazo al terrible vuelco económico que este proyecto significaría. Los turnos de palabra se establecieron por igual para las dos partes. Por la contraria al puerto hablaron Pedro Fernández Arcila en representación de ATAN que expuso las cuestiones jurídicas del tema y que señaló que se debía sancionar a las autoridades españolas por vulneración de la legalidad, María José Caballero por Greenpeace que habló de los aspectos contrarios al medio ambiente que tiene el proyecto y Pedro Anatael Meneses ex presidente de la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife defendiendo las alternativas al proyecto de Granadilla que son el actual Puerto de Santa Cruz y su posible ampliación hacia el dique de San Andrés. Los parlamentarios felicitaron a los opositores por la claridad de su exposición y lo ajustadas al tiempo indicado de 10 minutos. A los representantes de la administración se les regañó desde por excederse en el tiempo y se les dijo que a pesar de ser políticos profesionales no habían estado a la altura de los peticionarios contrarios en la calidad expositiva. De los treinta representantes sólo, como es lógico, hablaron unos cuantos y se supone que la mayoría irían a asesorar al asesor de asesoramiento de coalición canaria o a pegarse la gran vida y el viaje gratis a nuestra costa. Los compañeros que fueron, y que se pagaron el viaje de sus bolsillos o con el dinero de algunas organizaciones, que volaron de madrugada, comieron en sitios baratos, durmieron en pensiones humildes y que utilizaron las oficinas de Greenpeace y la infraestructura de los verdes europeos en Bruselas, destacan la patética intervención del Alcalde de Granadilla, Jaime González Cejas, de 45 segundos en la que dijo que el puerto se tenía que hacer porque el había sido alcalde durante tres legislaturas y eso le daba la legitimidad del pueblo. Frente a las razones de peso de lo contrarios, y el proyecto serio expuesto por Anatael Meneses, los representantes de la administración, ministerio de medio ambiente, autoridad portuaria, gobierno de Canarias, cabildo de Tenerife y ayuntamiento de Granadilla, no expusieron nada nuevo más que las razones falsas de siempre: que el proyecto traerá puestos de trabajo a la isla, que es imprescindible para la economía de Canarias, que el Puerto de Santa Cruz está saturado, que no hay alternativa a Granadilla o que todo ese puerto es necesario para la introducción del gas natural licuado para el abastecimiento de la central térmica del Sur. Durante los días siguientes los compañeros tuvieron diversas reuniones en Bruselas, a destacar la del Comisario de Medio Ambiente, Stravo Dimas, que duró más de lo previsto, en la que se mostró muy receptivo y que pidió que le hicieran llegar más información de las alternativas a Granadilla. Eso sí, una cosa quedó clara en la comparecencia del la Comisión de Peticiones: que en la actual estructura presupuestaria que se acaba a finales de este año de 2006 no quedan fondos para financiación de infraestructuras y que en la siguiente ronda, la que va de 2007 a 20013, Canarias cambia de estatus de región para Europa y que ya el tema de las infraestructuras, según el acuerdo de Lisboa, no es algo prioritario. Ahora dicen los políticos que se perdió dinero europeo por culpa de los del no cuando los auténticos responsables de la pérdida de esos fondos fueron los políticos que se han empecinado torpemente en un proyecto que sólo favorece a los empresarios que han comprado terrenos en Granadilla y quieren dar un pelotazo urbanístico sin precedentes. El dictamen de la comisión sobre el asunto se ha pospuesto hasta, en principio, a mediados de mayo, aunque es probable que el asunto en su conjunto se postergue uno seis meses más, para que se puedan analizar la alternativa a Granadilla que es el Puerto de Santa Cruz. Todo parece indicar, siguiendo la lógica de los hechos hasta el momento, si es que el lobby empresarial político mediático favorable al puerto en Granadilla no hunde sus garras mafiosas en las instituciones europeas, que las comisión se va a mostrar contraria a autorizar el puerto en Granadilla por las afecciones medioambientales y las alternativas al proyecto que es la ampliación de Santa Cruz.
Actualmente la Autoridad Portuaria de Santa Cruz de Tenerife, que preside Luis Suárez Trenor, pretende construir en San Andrés, justo donde los defensores del Puerto de Santa Cruz han presentado el proyecto de ampliación de Santa Cruz a Bruselas como alternativa a Granadilla, una marina para barcos privados y de recreo que se haría con la financiación privada a través de una concesión de explotación a la empresa Necso, que es una de las que está construyendo el tranvía de Santa Cruz a La Laguna o peatonalizando el Casco Histórico de esta ciudad, y que es de las que más tienen ganas de hincar el diente en Granadilla. El coste de mantenimiento por barco atracado y espacio disponible hace que el precio sea disparatado por lo que sólo se entiende que una empresa privada ponga ahí su dinero si el beneficio no está en otro lado ya que estamos acostumbrados a admitir que el dinero público sirve para el despilfarro pero una empresa privada no va a invertir dinero en un proyecto que le va a dar pérdidas porque no es una ONG. El objetivo de esta obra sería la de matar la vía de expansión del puerto de Santa Cruz para volver a sacar el tema de la ampliación de Granadilla como única posibilidad de solventar el problema portuario de la isla de Tenerife. Suárez Trenor decía que para ampliar el Puerto de Santa Cruz era necesario sacar rellenos del Parque Rural de Anaga, que es una zona protegida, pero se ha habilitado la cantera de la Jurada en este parque para sacar 3 millones de metros cúbicos de rellenos para construir esta marina privada. Además el mismo presidente decía que la ampliación de Santa Cruz iba a afectar al Lugar de Interés Comunitario, LIC, de San Andrés y, por lo visto, para esta obra ahora parece no importar que el LIC se vea afectado porque recordemos que iría en el mismo sitio en el que se podría ampliar el Puerto de Santa Cruz. Toda esta planificación se ha hecho con el mayor de los secretos posibles y sin sacar a la luz pública el tema porque han aprendido que con Granadilla lo peor que pudieron hacer fue darle gran bombo y platillo. Parece que han aprendido de sus errores estratégicos.
La regeneración de la vida pública es necesaria y en el caso de la comparecencia en la Comisión de Peticiones del Parlamento Europeo demuestra que unos cuantos ciudadanos honrados están muchísimo más preparados para defender los intereses de la ciudadanía que políticos profesionales electos que cobran cada uno mas de 60 mil euros de nuestros impuestos al año. Si nos dejaran hacer a nosotros todo sería más barato, más honrado, más legal y más pensado hacia el interés público. Eduardo Galeano comienza su libro Patas Arriba (la escuela del mundo al revés) con una cita que todos, desde los políticos hasta nuestro amigo el fumeta del principio, estarían de acuerdo. Dice así: “Hoy en día, ya la gente no respeta nada. Antes, poníamos en un pedestal la virtud, el honor, la verdad y la ley... La corrupción campea en la vida americana de nuestros días. Donde no se obedece otra ley, la corrupción es la única ley. La corrupción está minando este país. La virtud, el honor y la ley se han esfumado de nuestras vidas.” Estas eran unas declaraciones de Al Capone a un periodista publicadas el 17 de octubre de 1931 poco días antes de que fuera condenado y encarcelado por un tribunal por delitos fiscales, los únicos hechos que pudieron demostrarse en contra de este mafioso. Quizás en esta misma línea habría que analizar las declaraciones de Adán Martín cuando este domingo, en una entrevista al diario Canarias 7, decía necesitar de policía autonómica para detectar mejor los casos de corrupción afirmando que, cuando una manzana está podrida, se la saca del cesto como ha sido el caso de los documentos falsificados en la dirección general de vivienda en la que se han expedientado a los funcionarios malversadores. Le faltó decir que habría que alejar el cesto de su vista para no ver la manzana que como político ha tenido que morder alguna vez como dijo en Madrid cuando le preguntaron por la presentación del libro El Paraíso según Adán en la misma capital.