A la mayoría de los canarios nos pasa lo mismo con el día de Canarias que a los no creyentes con las festividades religiosas: es un día en el que no hay que trabajar y que sirve para descansar o para limpiar la casa. Muy alejados están tanto la secta que dirige Rouco-Varela de las personas reales como el gobierno que preside Adán Martín de los ciudadanos de canarias. Nosotros que somos ateos y canarios nos importa un bledo los derroteros de la iglesia católica, sobre nuestras consciencias no gobierna nadie, pero sí que nos perjudica un mal gobierno, como bien ha quedado demostrado en estos 13 años en los que coalición canaria se ha hecho cargo de las instituciones canarias.
Este tiempo ha sido terrible, y en muchos casos con alteraciones medioambientales probablemente irreversibles, y se ha abierto una importante fractura social entre las clases dominantes, herederas de los caciques, y los trabajadores asalariados. En Tenerife, tomándolo como ejemplo para no buscar más datos sobre el conjunto de empresarios de canarias porque son cifras que deben dar desánimo, sólo los diez empresarios estrella de la isla, dedicados a sectores como la salud privada, la construcción o la distribución, generan 750 millones de euros de beneficios declarados al año. La igualdad de oportunidades por la que, según los teóricos del liberalismo capitalista, todos los individuos podemos subir en la escala social es una falacia. Nada tenemos en contra de que la gente honradamente acumule una cierta fortuna pero la experiencia nos dice que los grandes capitales se forjan a través de priorizar intereses privados dentro de los poderes públicos. Esto es lo que sin duda ha pasado en Canarias en estos años de gobierno de coalición canaria. Mientras unos cuantos se han enriquecido, probablemente gracias a la confusión empresario sistema político, la mayoría de la población de las islas ha visto como han perdido capacidad económica, su calidad de vida ambiental ha bajado y los servicios sociales son prácticamente nulos y poco falta para llamarlos de beneficencia.
Lo que este martes 30 de mayo se pretende es que celebremos que una clase especial tiene, hoy más que nunca, unas capacidades formidables para meter pelotazos que hagan que determinadas cuentas de resultados se incremente exponencialmente. Llaman a todo eso canariedad, nacionalismo y la reivindicación de nuestras tradiciones. Mientras, en Canarias, un cuarto de la población, 477.000 personas, viven bajo el umbral de la pobreza. Empresas sanitarias y clínicas privadas reciben dinero público para concertar servicios sanitarios y se busca la privatización en la gestión de estos servicios que tienen la obligación de ser públicos. Mientras, en Canarias, hay 25.000 pacientes en listas de espera quirúrgicas, algunas llevan un año de espera para una prótesis de rodilla como la madre de unas amigas nuestras, y hay gente que en los servicios de urgencias de determinados hospitales tienen que pasar hasta días en los pasillos por falta de una cama. El sueldo del presidente del cabildo de Tenerife será este año 2006, en bruto y sin contar dietas, 93.493,16 euros (más que el presidente Zapatero que cobra sólo 87.552,12 euros). Mientras, en Canarias, los trabajadores soportamos las mayores tasas de temporalidad e inestabilidad laboral, los sueldos más bajos, hasta un 30% menos que en otras regiones de España, las mayores tasas de paro, la siniestralidad laboral más grande y la cesta de la compra más cara de todo el Estado Español. Los hijos de la gente rica, en toda economía bananera, van a estudiar fuera a buenos colegios en Londres o Estados Unidos que les den prestigio para sus títulos y poder volver a la hacienda a gobernar como sus padres pero con un punto de finura y a lo señorito. Mientras, en Canarias, el fracaso escolar, el ratio profesor alumnos y la tardanza en cubrir las bajas laborales de los profesores enfermos para las enseñanzas públicas obligatorias y secundarias es la mayor de España. El dinero destinado a las universidades canarias es una miseria y el gobierno de canarias tiene frentes de lucha abiertos contra
Este martes 30 de mayo de 2006 será un día de la vergüenza, como mismo lo han sido todos los 30 de mayo de esta década larga. Los viernes santos siempre los aprovechamos para dormir hasta un poco más tarde de lo normal, por eso del morbo a tener esa mañana relaciones íntimas con nuestras parejas, recoger la casa o hacer de comer algo especial que en días normales no nos da tiempo. Este día 30 yo me voy a levantar más temprano que de costumbre, a una hora que no lo haría ni para ir a trabajar. Me han regalado una cámara digital con una tarjeta de memoria de un gigabite. Con una resolución buena en modo estándar dice el manual que caben 1.097 imágenes. Vivo en Tenerife, me gustaría el mismo día ir a todas las islas pero es imposible, y me voy a dar una vuelta por los montes, las costas y los parques de la isla para sacar fotos del paisaje. Quiero retener imágenes de lugares como las playas de Granadilla, los montes de Anaga o determinadas áreas del Parque Nacional, que pronto empezará a gestionar el gobierno de canarias, antes de que estos desaparezcan por la presión que los constructores y los políticos de coalición están haciendo sobre nuestro territorio para enriquecerse personalmente. Puede que algún día muchos tengamos que emigrar de nuestra tierra porque ya no habrá oportunidades en ella debido a la fe ciega que nuestros gobernantes tienen hacia el modelo económico trasnochado, basado en las energías fósiles, el despilfarro energético, la construcción desaforada y el cemento, que quieren imponernos. Puede que esas imágenes sean algún día reliquias del pasado y que las enseñe ante ojos atónitos de personas que viven en otros lugares y me pregunten cómo pudieron dejar perder esos lugares. Yo contestaré que aquello fue Una Tierra Única de chorizos y ladrones y que por eso la gente de bien nos fuimos y los dejamos a ellos solos celebrando treintas de mayo mientras se alimentan del cemento, asfalto y de su mierda. Eso y una lágrima por ti, mi niña bonita, que te habré dejado atrás. Tú sabes a qué me refiero.
Canarias Digital, 29 de mayo de 2006.